Para el campanario y la torre de control del puerto, una nueva referencia marítima, una señal alta y clara marca la entrada a Le Havre. Anclado a los muelles, se levanta como el mástil de un barco para ofrecer al visitante el espectáculo de las actividades del hombre y las entradas y salidas de los barcos.
Inspirado en los baños termales de la época romana, el proyecto se desarrolla entre cajas, bordes limpios y formas al azar para ofrecer un entorno blanco, brillante y puro que sólo se rompe por las cajas de colores brillantes en el área de juegos infantiles.
El centro acuático se compone de 3 elementos principales: una piscina deportiva exterior, temperada de 50 mts de largo por 20 mt de ancho; una piscina interior /exterior de juegos, y un centro de bañoterapia.
Además el complejo cuenta con 12 piscinas, sauna, spa y gimnasio.
El acceso se realiza a través de una sala de recepción desde donde se accede a los vestidores de las piscinas de juego y deporte y a los de baño terapia. En el mismo nivel, 2 piscinas suspendidas son accesibles desde la piscina de juegos.
Una conexión interna vincula todas las piscinas para los visitantes con pase. El centro de cardio-entrenamiento, la administración (con un acceso separado) y las tres cafeterías se ubican en el mismo nivel y conectadas directamente al hall. El acceso a operaciones técnicas se ubica bajo las playas, a través de un patio a cielo abierto atrás del edificio. Un espacio de carga y descarga se integra al edificio.
El interior está cubierto de azulejos blancos y en el área de juegos infantiles se han utilizado bloques de espuma de colores brillantes.
La estructura y aspecto exterior del edificio es de hormigón pintado de negro con una base de grises y ventanas dispuestas al azar de diferentes tamaños.
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